
Un mes después de su desaparición en Bogotá, Medicina Legal confirmó la muerte de Héctor Hernández, un cantante de rap conocido como Samurái. La familia del músico de 34 años esperaba el resultado de los exámenes forenses que la entidad le practicaba a un cuerpo que fue hallado el 4 de enero en una ladrillera del sur de Bogotá.
Hasta este lunes, el único dato que se tenía sobre el cadáver encontrado es que correspondía a un hombre entre los 30 y 50 años. La familia del cantante había aportado pruebas a las autoridades para avanzar en la identificación, que culminó con la confirmación de que se trataba del rapero. “La causa de muerte corresponde a politraumatismo por elemento contundente”, aseguró Medicina Legal, sin dar más detalles.
Lo último que se supo de Samurái fue la llamada que le hizo a su mamá el 13 de diciembre para acordar una cita. Unas horas después, el mismo día de la desaparición, escribió en Facebook que había perdido su móvil. Todavía las autoridades no ubican el ordenador desde donde envió el mensaje. Su familia, que desde hace un mes se unió a sus seguidores para buscarlo en varias ciudades de Colombia, pide que el caso no sea cerrado.
El testimonio de una mujer que asegura haberlo visto en el centro de Bogotá sigue siendo clave para saber quién mató al músico. La Fiscalía ha revisado cámaras de seguridad de la zona, pero dicen que todavía no hay pistas. Su familia se sostiene en la tesis de que se trató de un robo. “Él no tenía enemigos, era una persona tranquila”, decía su prima Yina Hernández la semana pasada.
Samurái se hizo conocido en los años noventa y en 2003 fundó su propio sello musical Sangre oculta récords en Ciudad Bolívar, una de las zonas más pobladas y pobres de la capital del país. Desde que se denunció su desaparición, sus seguidores crearon grupos en Facebook y Twitter para coordinar la búsqueda y organizaron varias marchas en Bogotá gritando su nombre. La última fue el domingo.
Leave a Reply